Y tú, ¿prefieres leer en papel o en digital?
Desde hace unos años, la digitalización de la lectura es un hecho, algunos pensaron que sería el fin de los libros de papel, sin embargo, la realidad es que ambos formatos conviven hoy en día.
Incluso, los especialistas del sector editorial no tienen claro cómo será el futuro de la industria, ya que ambos formatos cuentan con nichos considerables de lectores, aunque la tendencia indica que los libros de papel van a la baja y el uso de dispositivos móviles a la alta.
¿Qué tanto se lee en papel y en digital?
De acuerdo con información proveniente de la UNESCO (La lectura en la era móvil: Un estudio sobre la lectura móvil en los países en desarrollo. Una mirada desde México) “entre 2006 y 2012 el porcentaje de personas que reportaban leer libros en papel cayó de 56.4% a 46.2% respectivamente.”
Por otra parte, de acuerdo a los indicadores de la Encuesta Nacional de Lectura referida en el anterior estudio, “el 14.5% de la población tiene una tableta y existen 64.4 millones de smartphones, lo cual representa un gran potencial en términos de población con capacidad de acceder a libros electrónicos.”.
El potencial de la lectura digital
En el diario El Economista se cita al Módulo sobre Lectura 2018 del Inegi y de acuerdo a sus datos, gracias a los dispositivos móviles sí ha habido una tendencia de aumento en los niveles de lectura en México, además de otros datos.
¿Es más ecológico el uso de libros electrónicos?
Uno de los principales argumentos a favor de la lectura digital era el de reducir la tala de árboles y la producción de papel, sin embargo también se cuestiona el impacto ecológico de los dispositivos móviles.
La fabricación de lectores o tablets no está generando muchas alternativas de reciclaje de materiales. En la extracción de ciertos minerales necesarios para su fabricación, se recurre a la deforestación y explotación de terrenos y recursos en países subdesarrollados.
El futuro de la lectura
Mientras la industria se cuestiona su propio futuro, hoy en día ya existen nuevas alternativas como el uso de papel sintético, fabricado a partir de plástico reciclado y que además de ser impermeable, es funcional en la mayoría de los procesos de impresión convencionales.
Por otra parte, diseñadores de dispositivos móviles ya están creando teléfonos o tablets más amigables con el medio ambiente, en su producción y en su impacto.